Excelente conferencia de Joan Melé, subdirector de Tríodos Bank y difusor de la banca ética. Brillante en la exposición, y sobresaliente en su capacidad movilizadora de consciencias. Nos invita aquí a reflexionar sobre nuestra propia responsabilidad ecológica y humanitaria en la sociedad globalizada que vivimos ¿a quién sirve nuestro dinero? ¿a dónde va a parar y qué impacto tiene cada vez que compramos algo, o lo ingresamos en un banco?
Para los y las que aún no la hayáis visto, dejo aquí algunos fragmentos con la intención de animaros a hacerlo -pinchando en la imagen-. Esto es sólo un pequeño botón de muestra extraído del principio de la conferencia, la cual a medida que avanza se va haciendo más intensa e interesante (¡avisados estáis!)
Si compras lo que se te antoja, estás siendo co-responsable de la destrucción del planeta.
La Tierra es un organismo vivo, y nosotros somos sus células. Y la diferencia entre un mecanismo y un organismo, es que el mecanismo es la suma de sus partes mientras que en el organismo cada parte se relaciona con el todo y es un reflejo de él.
No hay mejor imágen orgánica que el cuerpo humano. En el cuerpo humano cuando unas células quieren crecer sin tener en cuenta la totalidad, a esto le llamamos cáncer.
La tendencia a la uniformidad y el pensamiento único animaliza al ser humano. Si no estropeáramos a los niños en el proceso de la infancia y la juventud con una educación excesivamente uniformada, cada generación traería nuevas capacidades que nos podrían ayudar a la anterior. Pero a pesar de que nos va mal nos empeñamos en enseñar lo mismo que hacíamos nosotros aunque no nos funcionara. Vamos perpertuando el modelo: Los niños que estudien lo que les ponemos y lo repitan en el exámen. Lo que tendríamos que hacer es dejar que fueran ellos mismos. Porque cada uno de nosotros es diferente, y esa es nuestra riqueza y nuestra grandeza.
Antes se decía, "tienes que estudiar para ser alguien de provecho, que significa que puedas aportar algo al mundo". Y ahora se dice, "tienes que estudiar porque el día de mañana si no tienes dos carreras, dos idiomas y dos masters no podrás ganarte la vida. La vida va a ser un combate, hay mucha competencia". Esto a un joven tenéis que entender que nunca le va a motivar. Decimos ¿qué pasa, porqué hacen botellón y porqué se drogan? Es normal, yo probablemente también lo haría. Porque no hay nada que les mostramos que les atraiga, no hay nada que tenga que ver con lo que llevan dentro como inquietud.
Si no dedicas una parte de tu tiempo a tu parte interior, tu vida será animal, instintiva, fácilmente manipulable. Una sociedad consumista es fácilmente manipulable.
Cuando uno no consume ecológico, además de agredir su salud está agrediendo el planeta y los derechos de los seres humanos.
No podemos seguir con la ley de la oferta y la demanda, y la competencia. Nos han inoculado este concepto desde la época de Adam Smith, padre de la economía moderna. Tengo que decir que ya de adulto he descubierto que es mentira, no existe esta ley. No es una ley, Ley significa que sólo puede ser así. Y las relaciones entre seres humanos pueden ser de muchas maneras.
Que cada uno mire maximizar su beneficio personal, que el mercado ya lo regulará todo, esto es lo que se enseña en la universidad. Sé egoista que el mundo irá mejor. Y primero, el mercado no regula. Segundo, es una perversión moral decirle a la gente joven, "tú preocupate por lo tuyo". Preocúpate por cómo afectan tus acciones a tu entorno. Tenemos que volver a la responsabilidad personal. Hay muchos que hace tiempo preguntan ¿cuándo saldremos de la crisis? y no nos hemos dado cuenta de que nosotros somos la crisis.
La Tierra es un organismo vivo, y nosotros somos sus células. Y la diferencia entre un mecanismo y un organismo, es que el mecanismo es la suma de sus partes mientras que en el organismo cada parte se relaciona con el todo y es un reflejo de él.
No hay mejor imágen orgánica que el cuerpo humano. En el cuerpo humano cuando unas células quieren crecer sin tener en cuenta la totalidad, a esto le llamamos cáncer.
La tendencia a la uniformidad y el pensamiento único animaliza al ser humano. Si no estropeáramos a los niños en el proceso de la infancia y la juventud con una educación excesivamente uniformada, cada generación traería nuevas capacidades que nos podrían ayudar a la anterior. Pero a pesar de que nos va mal nos empeñamos en enseñar lo mismo que hacíamos nosotros aunque no nos funcionara. Vamos perpertuando el modelo: Los niños que estudien lo que les ponemos y lo repitan en el exámen. Lo que tendríamos que hacer es dejar que fueran ellos mismos. Porque cada uno de nosotros es diferente, y esa es nuestra riqueza y nuestra grandeza.
Antes se decía, "tienes que estudiar para ser alguien de provecho, que significa que puedas aportar algo al mundo". Y ahora se dice, "tienes que estudiar porque el día de mañana si no tienes dos carreras, dos idiomas y dos masters no podrás ganarte la vida. La vida va a ser un combate, hay mucha competencia". Esto a un joven tenéis que entender que nunca le va a motivar. Decimos ¿qué pasa, porqué hacen botellón y porqué se drogan? Es normal, yo probablemente también lo haría. Porque no hay nada que les mostramos que les atraiga, no hay nada que tenga que ver con lo que llevan dentro como inquietud.
Si no dedicas una parte de tu tiempo a tu parte interior, tu vida será animal, instintiva, fácilmente manipulable. Una sociedad consumista es fácilmente manipulable.
Cuando uno no consume ecológico, además de agredir su salud está agrediendo el planeta y los derechos de los seres humanos.
No podemos seguir con la ley de la oferta y la demanda, y la competencia. Nos han inoculado este concepto desde la época de Adam Smith, padre de la economía moderna. Tengo que decir que ya de adulto he descubierto que es mentira, no existe esta ley. No es una ley, Ley significa que sólo puede ser así. Y las relaciones entre seres humanos pueden ser de muchas maneras.
Que cada uno mire maximizar su beneficio personal, que el mercado ya lo regulará todo, esto es lo que se enseña en la universidad. Sé egoista que el mundo irá mejor. Y primero, el mercado no regula. Segundo, es una perversión moral decirle a la gente joven, "tú preocupate por lo tuyo". Preocúpate por cómo afectan tus acciones a tu entorno. Tenemos que volver a la responsabilidad personal. Hay muchos que hace tiempo preguntan ¿cuándo saldremos de la crisis? y no nos hemos dado cuenta de que nosotros somos la crisis.
Está bien que ya nada sea seguro. Siempre buscábamos la seguridad fuera, y ahora ya ni bancos ni cajas de ahorros ni compañías de seguros ni nada. A ver si así por fín descubrimos que el centro de gravedad debe estar dentro, y la seguridad debemos buscarla dentro de nosotros. Con respeto a las personas que están sufriendo, bienvenida la crisis si nos hace despertar en esta toma de las riendas de la situación.
Joan Melé
Video de la conferencia disponible en:
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